De un tiempo para atrás varios PH han venido presentando inconvenientes con algunos copropietarios que por diversas razones empezaron a alquilar sus apartamentos o casas como alojamientos temporales para temporadas cortas vacaciones o por trabajo. Muchos propietarios por problemas económicos causados por la pandemia han decidido alquilar sus propiedades a turistas para solventar su situación económica. 

Se deben aclarar dos términos que pueden generar confusión dentro de este tema: Vivienda residencial vs. alojamiento turístico. 

Vamos a entender la vivienda residencial como un espacio pensado, diseñado, planeado y construido para ser habitado por personas que residan en ese lugar. Luego de que una persona adquiera una vivienda residencial, y esté lista para habitar, esta construcción es entregada a los copropietarios quienes crean la junta directiva y escogen a un administrador, diseñan y elaboran su propio reglamento en donde la mayoría tienen explicito que la propiedad horizontal es constituida como un lugar residencial para quienes lo habitan.  

Mientras que un alojamiento turístico es un espacio pensado, diseñado, planeado, construido y constituido como un ambiente para ofrecer alojamiento a turistas o personas que visitan el lugar por un periodo de tiempo determinado de forma temporal. 

Como lo mencionamos anteriormente, muchos propietarios que tienen dentro de sus propiedades varios inmuebles, han optado por alquilarlas para solventar sus situaciones económicas. Esta modalidad incrementó debido a las complicaciones económicas que tuvieron en la pandemia. Esta acción ha presentado incomodidades e inconformidades dentro de la comunidad de PH, ya que pueden ser un riesgo para quienes habitan allí, están obligados a compartir las áreas comunes con quienes alquilan el inmueble, dado que al pagar por este servicio tienen derecho de su uso, influye negativamente con la naturaleza de la construcción y además altera las condiciones de la comunidad.  

Todas las personas son libres de hacer uso de sus inmuebles como mejor les convenga siempre dentro del límite de lo que permite la ley y el reglamento de la copropiedad, respetando y siendo conscientes de que no puede afectar la seguridad, tranquilidad y estabilidad de los demás residentes. 

Las plataformas más conocidas a nivel mundial en donde se pueden publicar los inmuebles para su alquiler son:  

Airbnb: una plataforma digital que permite a los usuarios ofrecer alojamientos a diferentes personas, particulares o turistas, y que estos puedan alquilar su inmueble por un pago monetario dependiendo de la cantidad de días necesarios. 

Booking: es un metabuscador de viajes, en el cual permite reservar vuelos, hoteles y apartamentos o casas (nueva funcionalidad), presentando un listado de alojamientos dependiendo de las necesidades del cliente, le permite filtrar por cantidad de habitaciones, con o sin baño, presupuesto, entre otros.  

Niumba: es un directorio de apartamentos para alquiler, de la empresa TripAdvidor Media Group. La cual ofrece propiedades privadas para alquiler vacacional principalmente, en donde a través de la plataforma los viajeros se pueden comunicar directamente con los propietarios de los inmuebles. 

Para evitar esta modalidad dentro de la comunidad del PH, se debe establecer en el reglamento de la copropiedad, el uso específico de las unidades inmobiliarias pertenecientes a la propiedad. Cuando está explícito en el reglamento, los propietarios que hagan uso de las unidades de una forma inadecuada estarán obligados a responder frente a las entidades regulatorias. Es obligación de la administración estar atento a cualquier situación que se presente si se llega a descubrir que un propietario está haciendo uso indebido de su unidad inmobiliaria. Actuar de forma rápida y anticipada va a permitir que en el PH no se presenten incidentes relacionados al alquiler temporal de viviendas dentro de plataformas turísticas o contratos particulares.

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